Todo sabemos que la tecnología está cambiando muchos aspectos de nuestra vida diaria. Los primeros avances que se dieron en el campo de la salud, habían estado orientado a medir nuestra actividad física, mientras hacemos nuestra actividad deportiva. Así se había conseguido monitorizar nuestros datos, gracias a las pulseras cuantificadoras o smartwatch y a las apps que nos descargamos en nuestro smartphone.

Pero los avances en el campo sanitario, van más allá. Todo hace indiciar que este año 2016, los wearables serán una de las tres tecnologías que revolucionaran la salud. En este aspecto se había ya conseguido mucho en el desarrollo de conectividad entre pacientes de enfermedades crónicas, consiguiendo un seguimiento detallado y un tratamiento personalizado. Pero a su vez, también se ha conseguido trazar patrones de comportamiento generalizados, en el desarrollo de estas enfermedades.

Pero ahora los avances se encuentran focalizados en la monitorización de pacientes de riesgos en los hospitales.  De esta manera, a través de los biosensores de los dispositivos wearables, se mantendría un control absoluto de signos vitales clínicamente relevantes del paciente. Así se conseguiría un seguimiento personalizado, de pacientes en situación de riesgo, pero fuera de la UCI. Con esto se conseguiría actuar de una forma más rápida, ante cualquier anomalía de la enfermedad.

En el campo de la salud, Philips esta siendo pionera en el desarrollo de estas tecnologías.  Estamos seguro, que el desarrollo de estos wearables servirá para salvar muchas vidas. Así veremos como en los próximos años, el campo sanitario va estar en constante evolución y avances y finalmente acabaremos familiarizando con los wearables que se vayan desarrollando, en el afán de prevenir enfermedades.